A la madrugada nos fuimos a la playa. Las estrellas estaban divinas y pretendíamos quedarla ahí. Mati tenía las super flores así que en la oscuridad nos alejamos lo más que pudimos del camping y se puso a armar a espaldas nuestras por el viento, Ludy agrega: “Tranca que no hay policías”. Un minuto después linternazo a la cara de Mati. “¿Qué está haciendo?” – “Nada…”. – “¿Qué tiene ahí?” – “Marihuana”. Liiisto pensé yo, todos en cana. Nosotras mute mientras el tipo indagaba y revisaba todo. – “Tiene más?”, insistió. – “No”, responde tranqui Mati. El tipo empieza a alumbrar al lado de Ludy y le pregunta qué había. Lu con su inocencia le mostraba el celular, la linterna, los puchos de Mati… el tipo los agarra, saca otro. “Me van a tener que acompañar”. Arrancamos todos a caminar y Mati me pide que vaya a sacar lo que había en su mochila, me hice la boluda y rajé. Fui a su hamaca, saqué todo, me cambié por las dudas y volví a buscarlos. Nos dijeron que acá la policía es re jodida con el tema excepto con los que arreglan, claro. Pasaba el tiempo y ni noticias de ninguno de los tres. Me senté a esperar pensando lo peor. Nos vi deportados, como siempre la imagen de la abuela viendo el noticiero y metidos en una banda narco. Todo.
Mientras tanto en otro lado…
El cana los llevó a la enfermería, que es donde funciona también su cuartel. Primero pasó Mati solo y después el tipo pidió que también pasen sus amigas y cierra la puerta. San consulta: Disculpa… ¿Cuál es el procedimiento ahora?. Explicó que iba a dejar constancia en el acta del hecho, que había que firmar y que podían retirarse. El acta decía algo así: “Se incautó una sustancia vegetal de color verde con aspecto similar o igual a la marihuana”. Ahí llegó otro poli que preguntó por qué los agarraron. Mati ya más relajado con el asunto le dice mostrándole el faso: “Por esto”. “Los vamos a tener que sacar del Parque”, dice. Ludy se puso en putita mode on y le decía que no con pucherito. Genia. Ahí todo se fue al carajo y el poli arrancó a chamuyarla, claro.
Los volví a encontrar y me volvió el alma al cuerpo, más cuando me contaron lo bizarro que terminó siendo todo y terminamos cagándonos de risa.